Salinas Pliego y Erasmo Catarino

julio 1, 2025
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FOTOGRAFÍA: ESPECIAL

Por Álvaro Delgado Gómez

El cantante Erasmo Catarino, ganador del concurso “La Academia” de Televisión Azteca en 2005, se convirtió en Senador. Fue un acontecimiento en el mundillo de la farándula, aunque haya sido sólo por cuatro días, del 26 al 29 de junio. En este breve lapso sustituyó a Luis Armando Melgar Bravo, el Senador propietario del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), quien prefirió irse a disfrutar las islas griegas que cumplir con su deber de legislar.

¿Qué obligó a Melgar Bravo, un priista chiapaneco que se pasó al PVEM, a abandonar su responsabilidad como miembro de un poder del Estado para irse a un viaje de placer? Fue una orden de su verdadero jefe, Ricardo Salinas Pliego, para tramar, lejos del país, la estrategia contra el Gobierno de México y ya directamente la ofensiva contra la Presidenta Claudia Sheinbaum, quien exhibió su gigantesca deuda de impuestos que ya llega a 74 mil millones de pesos.

El propio magnate reveló la condición de empleado de Melgar Bravo cuando, en una publicación del domingo 29 de junio en sus redes sociales, describió la fotografía en la que posan él y otros de sus subordinados, en la Puerta de Adriano en Antalya, Grecia: “Me acompañan mis colaboradores Adrián Steckel, Fabrice Decelere, Eduardo Kuri, Luis Armando Melgar y Rodrigo Priego”.

Fue en ese mismo viaje, a bordo de su yate, que Salinas Pliego se refirió por primera vez a Sheinbaum de manera despectiva como “señora”, no Presidenta de México, la tildó de mentirosa y la asoció al publicista de Adolfo Hitler sabiendo su origen judío: “Es la mejor alumna de Goebbels, el ministro de propaganda de Hitler, y Goebbels decía: Tú repite una mentira mil veces y vas a ver que se convierte en verdad. Entonces la señora está mintiendo, mintiendo mil veces, pero eso no lo hace verdad.”

Es conocida la misoginia y vulgaridad de Salinas Pliego, pero la alusión a Goebbels para golpear a Sheinbaum no es fortuita: Además de heredar la fortuna económica, legó de su padre, Hugo Salinas Price, su pensamiento y acción de extrema derecha.

Salinas Price está confeso de participar y financiar proyectos fascistas, anticomunistas y antisemitas, como su frustrado Partido Nacionalista y la Revista Nacional, al lado de pronazis, como Jorge Prieto Laurens, y su amigo Agustín Navarro Vázquez, uno de los agentes de la CIA en México que manejaban grupos de choque como MURO, al que el empresario reconoce que daba dinero para generar violencia.

“Siempre apoyé a Navarro Vázquez, un verdadero héroe de la libertad, a quien la patria no le ha rendido el debido reconocimiento. En varias conversaciones me planteó la conveniencia de crear un grupo de choque de jóvenes, a efecto de que contrarrestar el terror de la izquierda entre estudiantes. Se llamaría MURO, por sus iniciales: Movimiento Universitario de Renovadora Orientación”.

También Salinas Pliego heredó de su padre y de su abuelo, Hugo Salinas Rocha, además de su riqueza, las maniobras para no pagar impuestos. En su libro Mis Años Con Elektra, Salinas Price reconoce que Elektra nació para no pagar los impuestos que debía al IMSS.

En 1950, narra, cambió el nombre de Radioeléctrica a Elektra: “Durante años destruimos papeles con el membrete de Radiotécnica, porque el Seguro Social nos cazaba como ‘patrón sustituto’ para cobrar adeudos con recargos. Siempre aparecían los malditos papeles. La obra de limpia finalmente concluyó, con el resultado de que hoy no queda rastro de aquella empresa que dio lugar a Elektra”.

El pasado y el presente son tiempos que se acompañan para explicar las conductas de Salinas Pliego, quien busca culpables en donde sea para evadir sus propias responsabilidades. Eludir y evadir el pago de impuestos durante 16 años, con todo tipo de recursos, es culpa sólo de él.

De hecho, los criterios en los tribunales para negarle a Salinas Pliego los amparos vienen de antes del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador y son del Poder Judicial, pero él quería como “amigo” del Presidente, que éste influyera para no pagar, como él mismo lo admitió.

De hecho, el magnate que ahora critica el AIFA, por ejemplo, en 2021 visitó la obra y en un video dijo que era una obra impresionante. “Me quedé con el ojo cuadrado”, dijo, en tiempos en que negociaba con López Obrador una rebaja a su multimillonaria deuda.

Ha llegado la hora en que el Poder Judicial resuelva, en definitiva, los adeudos de Salinas Pliego. Tres de los numerosos litigios serán resueltos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Y así como es fundamental someter a escrutinio la votación de los ministros, también hay que observar a los políticos que están a su servicio, como Melgar Bravo, quien antepone los intereses de su jefe a los de la República.

No debe olvidarse que Salinas Pliego ya tuvo, de manera descarada, su telebancada, con su propia hija, Ninfa Salinas Sada, al frente de los senadores del PVEM, que ni es verde ni ecologista, y que Carlos Alberto Puente Salas, coordinador de los diputados federales de ese partido, ha sido su operador político desde 1998 como gerente de Estrategias y Desarrollo Político y director de Enlace Gubernamental en TV Azteca

Y sí: Que de una vez Melgar Bravo trabaje de tiempo completo con Salinas Pliego, sin simular que legisla, y deje la senaduría a Erasmo Catarino González Delgado, que quizá no tiene esas ataduras políticas…

SinEmbargo

MÁS DEL AUTOR:

Álvaro Delgado

Álvaro Delgado Gómez es periodista. Empezó en 1986 como reportero y ha pasado por las redacciones de El Financiero, El Nacional y El Universal. En 1994 ingresó como reportero al semanario Proceso, en el que fue jefe de Información Política y especializado en la cobertura de asuntos políticos.

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