El Espectador | México al Comando Sur: dinero, fronteras y una reubicación estratégica

junio 18, 2025
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Por Hiroshi Takahashi

“El Comité también incluye una disposición que transfiere a México del área de responsabilidad del Comando Norte de Estados Unidos al área de responsabilidad del Comando Sur. Esta transferencia es necesaria para permitir una mejor coordinación y priorización entre los países dentro del área del Comando Sur. El Comando Sur está mejor posicionado para abordar los desafíos de seguridad compartidos entre México y sus vecinos de Centro y Sudamérica, particularmente en los temas de narcotráfico e inmigración ilegal”, así lo plantea el informe del Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes, que acompaña el proyecto de ley de presupuesto del Departamento de Defensa de Estados Unidos para 2026. 

La propuesta aún no es ley, pero su inclusión en el documento más importante de planeación militar del Congreso marca una intención clara: Estados Unidos quiere reubicar estratégicamente a México dentro de su arquitectura de seguridad.

El cambio, de ser aprobado, implicaría que México deje de ser atendido por el Comando Norte (NORTHCOM), que cubre la defensa continental con Canadá y el propio Estados Unidos, y pase a estar bajo el Comando Sur (SOUTHCOM), enfocado en América Latina y el Caribe. No es un tecnicismo. Es una señal política de reposicionamiento: México sería tratado no como socio prioritario de frontera, sino como parte de una región considerada inestable, marcada por el crimen organizado, las rutas del narcotráfico y la migración desbordada.

El documento detalla un presupuesto total de 832 mil millones de dólares para el Departamento de Defensa, de los cuales 283 mil millones serán destinados a Operaciones y Mantenimiento, donde se incluye explícitamente el fortalecimiento de la seguridad en la frontera sur de Estados Unidos. “El financiamiento respaldará necesidades de entrenamiento operativo, vigilancia terrestre y marítima, despliegue de tecnología de detección avanzada y cooperación con aliados regionales”, señala el informe. Se trata del mayor presupuesto operativo aprobado en tiempos de paz, y una parte está directamente relacionada con el objetivo de frenar “el tráfico de personas, drogas y materiales peligrosos” provenientes del sur.

El narcotráfico es mencionado en más de una decena de ocasiones como una amenaza crítica, y se establece que las redes criminales transnacionales requieren una respuesta integrada que combine tecnología, alianzas bilaterales y despliegue de capacidades avanzadas de destrucción. El Comando Sur, dice el documento, está mejor posicionado para ejecutar esa tarea en el hemisferio occidental.

Para México, esto tiene varias implicaciones. En primer lugar, dejaría de ser tratado como un aliado estratégico de frontera inmediata —con acceso directo al corazón de la defensa continental— y pasaría a ser gestionado como parte de una región donde las prioridades son el control, la estabilidad y la vigilancia multilateral. 

En segundo lugar, aumentaría la presión para alinear su política de seguridad con los intereses regionales de Estados Unidos, lo que incluye participación en ejercicios militares conjuntos, intercambio sistemático de datos y cooperación en sistemas de seguimiento satelital, marítimo y terrestre.

En tiempos en que la frontera se ha convertido en el centro del debate político estadounidense, y donde México es constantemente señalado por su papel en la cadena del fentanilo, los flujos migratorios y la expansión del crimen organizado, esta propuesta consolida una visión: México ya no es un socio con quien se negocia, sino un territorio que se gestiona. Si el Congreso de Estados Unidos convierte esta propuesta en ley, México será parte formal del Comando Sur. El silencio, en este caso, también es una forma de aceptación.

El Sol de México

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Hiroshi Takahashi

Hiroshi Takahashi se ha especializado en el campo del periodismo de investigación, científico y tecnológico en la UNAM, la Universidad Iberoamericana, el ITESM, The Florida International University (FIU), entre otras universidades.

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