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Saltillo, Coah.- Después de buscar en la yoga la estabilidad emocional luego de ser afectada tras vivir violencia sexual, física y psicológica, hoy Jessica, una mujer saltillense que sostuvo una relación con un funcionario estatal, es señalada de bruja y realizar prácticas esotéricas.
Carlos A., quien se desempeña como parte del área jurídica en el Instituto de Pensiones para los Trabajadores del Gobierno de Coahuila, la acusó de bruja durante el juicio en el que busca la custodia de sus dos hijos menores de edad y recuperar la renta del inmueble que ocupan tras la separación.
Jessica asegura que fue en el año 2017 cuando ocurrió la primer violencia sexual en su contra por parte de su ex pareja. Esto sucedió durante el tiempo en que Carlos A. no obtuvo un cargo durante la administración.
Desde entonces, Jessica empezó a practicar la meditación para poder sobrellevar la violencia de la que era objeto, pero Carlos A., de nueva cuenta volvió a agredirla.
Fue entonces que la mujer comenzó los trámites de divorcio en el cual se determinó que los menores estarían bajo el cuidado de la madre.
El funcionario ahora inició un juicio para quedarse con la custodia de los hijos, bajo el argumento de que no se encuentran en lugar seguro, dado que su madre realiza actos de brujería y esoterismo.
El caso se encuentra en el Juzgado Primero de Tercera Instancia en materia civil donde Jessica se enteró del argumento de su expareja para seguir violentándola.
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