Redacción El Coahuilense
La elección judicial extraordinaria generó —ya se ha escrito— un problema grave en lo que toca a Sergio Díaz Rendón, el ganador de un asiento en la Sala Regional Monterrey del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
El desarrollo de esa elección dejó en el camino a Ernesto Camacho quien, por ahora, se ha convertido en uno de los impugnadores más enérgicos de la elección con al menos 22 causales invocadas para pretendidamente revertir el resultado o anular la elección.
Pero no se trata solo de los efectos judiciales postelectorales derivados del extraño triunfo de Díaz Rendón lo que problematiza las cosas.
También hay una cierta incertidumbre en lo que corresponde a lo que la Sala Regional deba resolver sobre asuntos que no tienen que ver con la pasada elección judicial. Porque en esa Sala es magistrado precisamente el derrotado Camacho.
Será Camacho y sus compañeras quienes resuelvan diferentes asuntos de interés coahuilense y, entre los más destacados, el del registro de dos nuevos partidos políticos, México Avante y Joven Partido de la Gente, cuyo inicio de operaciones está en vilo por la impugnación que Unidad Democrática de Coahuila llevó a la Sala Monterrey y, al parecer, a la ponencia de Camacho.
En el histórico de decisiones, Ernesto Camacho votó con frecuencia los asuntos como los quería el priismo coahuilense, mismo que ahora es observado como artífice del resultado que le dio la vuelta con 80 mil votos en las últimas horas del conteo.
Quién sabe quién convenció a los tomadores de decisiones de que Díaz Rendón era una buena opción pero, por lo visto, no previeron las judicializaciones que enfrenta ni mucho menos los efectos colaterales para el proyecto político estatal.
Pleitazos en Torreón
Desde la primera semana de mayo, las cosas se le empezaron a complicar a Ariel Martínez Mendoza, quien hasta unos días antes era hombre de toda confianza del alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda.
Martínez Mendoza venía acumulando algunas malquerencias desde que se desempeñó como secretario particular la pasada administración, así que una vez nombrado jefe de Gabinete, parecía que el impulso del alcalde era incuestionable para el resto del equipo.
Nadie sabe muy bien qué sucedió los últimos días de abril con la posición de Ariel, pero desde entonces, no hay director en el Ayuntamiento que tenga buena opinión y para muchos, mejor ni dejarse ver con él.
Cómo se recordará, por esos días se dio la crisis por la jefatura de seguridad en la que Ariel fue muy visto en fotos oficiales.
En el círculo rojo torreonense hay quien señala que Martínez Mendoza tiene problemas de discreción e inclusive de lealtad.
Pero un sector asegura que el verdadero problema es que al joven funcionario le dieron ganas de meterse a influir en cosas como el contrato con PASA.
Impericia o cinismo
El pasado viernes, Osvaldo Aguilar, titular de la Dirección de Pensiones de los Trabajadores de la Educación (Dipetre), compartió una fotografía con Jesús Gerardo Sotomayor, magistrado Presidente del Tribunal de Justicia Administrativa.
Esa costumbre de los políticos por mostrar todo en sus redes, tiene la particularidad de omitir aquello que puede considerarse una inconveniencia política o perjudicar a una de las partes cuando de asuntos de justicia se trata.
Dados los antecedentes del Dipetre y las observaciones millonarias que han arrojado las auditorías desde hace una década, postear que tuvo “una jornada productiva” y el hashtag #bienjugado cuando menos debe molestar a los profesores jubilados y pensionados que vienen reclamando el desastre de la dicha dirección.
Aún peor. Exhibir así a un profesional del derecho y magistrado que no tiene mácula en su desempeño como tal, aun si no hubiera algo qué ocultar, es una irresponsabilidad de Aguilar porque no hubo comunicación oficial sobre esa jornada ni explicación sobre lo bien jugado.
Y es que en los juzgados y salas judiciales es como en Las Vegas, cualquier novato lo sabe: lo que sucede ahí dentro se queda ahí.
¿Impericia, cinismo o inmaduro sometimiento a la dictadura del click?
Obras públicas de Piedras
A propósito de impericias, la situación con los trabajadores despedidos de Obras Públicas en Piedras Negras se empieza a complicar más de lo esperado.
Solo un trabajador de 120 despedidos, aceptó la liquidación lo que anticipa un grave proceso judicial laboral que impactará de manera grave las finanzas públicas.
Las acciones del alcalde Jacobo Rodríguez, son ya problemas de futuro pues, por los tiempos de la justicia laboral, la sentencia que muy probablemente favorezca a los despedidos, será resuelta cuando esté iniciando la próxima administración.
Y apenas van seis meses.
Cultura en territorio
Hay quienes han entendido los nuevos tiempos y las demandas de las sociedades que exigen una atención más directa y una mayor proximidad de sus gobernantes.
Quien definió una política así desde su periodo de campaña es el alcalde Javier Díaz.
No se trata de dar coba porque sí pero es que, como nunca hasta donde se tiene memoria, se ha dedicado, por ejemplo, una política cultural centrada en barrios y colonias populares.
En el semestre que está por concluir, sectores populares de Saltillo han tenido acceso a programas culturales que muchas veces eran de élite, como la Filarmónica del Desierto o los ensambles instrumentales y operísticos tradicionalmente confinados al Teatro de la Ciudad o alguna sala de concierto.
Hay mucho por hacer en materia cultural siempre, pero quizás este sea uno de los avances más significativos que hemos visto y, naturalmente, tiene réditos políticos.
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